Ya sé que hablar ahora de la Navidad suena muy lejano, pero hasta ahora no había tenido tiempo de compartir algunas fotos que hicimos esos días 😉
Y como tampoco soy amiga de las fotos extremadamente recargadas y navideñas, nos sirven para mostrar fotos en el bosque en cualquier época del año.
Si os habéis hecho fotos conmigo antes sabréis que no miro mucho el reloj y que las sesiones suelen alargarse bastante, para que los niños (y vosotros, si también participáis) acaben estando muy cómodos conmigo y con la cámara y podamos obtener fotos espontáneas y naturales. Pero las minisesiones de Navidad duran sólo media hora y a algunos peques les cuesta un poco soltarse (y cuando la cosa se pone interesante ya es hora de pasar a la siguiente sesión). Peeeero, eso no pasó con Gal·la!! Estuvo divertida, abierta y disfrutando desde el principio de las fotos y conectamos de maravilla! Además, tanto ella como su mamá son muy expresivas y fue muy divertido retratarlas.
Os dejo aquí algunas de las fotos que hicimos para ver si también veis en ellas lo bien que lo pasamos.
Y ya sabéis que si os apetece tener fotos tan bonitas como éstas podéis poneros en contacto conmigo para reservar vuestra propia sesión.